El próximo martes empezará a promocionarse el combate que protagonizarán Manny Pacquiao y Timothy Bradley Jr. El enfrentamiento se producirá el 9 de junio en el hotel MGM Grand Garden de Las Vegas.
Los aficionados al boxeo hubieran deseado que Floyd Mayweather Jr. estuviera ese martes junto al púgil filipino en el Hotel Beverly Hills. Pero la pelea que todos quieren ver no es posible, al menos por ahora, y rápidamente el campeón filipino miró hacia abajo la lista de retadores para organizar una pelea en pos del disfrute de sus seguidores.
Sin dudas no habrá nada ni nadie que pueda suplir la pesada ausencia de Mayweather, sin embargo tanto Manny como Timothy Jr. ya se tiraron flores mutuamente y posaron para los flayes.
Dejando la puerta abierta al gran choque, el legislador filipino sostuvo: “Estoy dispuesto a pelea con Mayweather, pero tengo que enfrentar a los muchachos que anhelan pelear conmigo”.
Respecto a su próximo rival sostuvo: “Timothy Bradley es fuerte y puede golpear con fuerza. Es un buen boxeador, así que es un reto pelear con semejante tipo”.
Todo parece indicar que el final de la carrera pugilística para Pacquiao se acerca. Tras sus dos últimos combates, se alejaría de los cuadriláteros: “Mis hijos me piden: ‘Papi, quiero que te retires, pero antes tienes que pelear con Mayweather y derrotarlo’’’, comentó con una gran sonrisa.
Según el filipino, y tras ser consultado por el fracaso de la pelea con Floyd, dijo que el norteamericano le ofreció 40 millones de dólares garantizados, pero ni un centavo de los ingresos de la transmisión televisiva que ascenderían a 150 millones. “Eso me parece vergonzoso. Está tratando de aprovecharse de mí. No quiere pelear”, declaró.
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